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Entre un horizonte posiblemente electrificado en el que no tengan lugar los motores de combustión, y un pasado en el que la única alternativa estaba entre gasolina o diésel, a finales de los años 90 del siglo XX comenzó a desarrollarse una tecnología nueva que hoy en día es una de las alternativas más interesantes del sector de la automoción: los coches híbridos.
¿Estás valorando la compra o el renting de un híbrido? Como decíamos, es una de las opciones mejor valoradas por los usuarios en los últimos años, gracias a sus grandes ventajas.
Pero, ¿sabes cómo funciona un coche híbrido? ¿No? Nada de lo que preocuparse, en este post daremos buena cuenta de los diferentes tipos de coches híbridos, conoceremos un poco su historia y explicaremos cómo funcionan y cuáles son sus ventajas frente a motores de combustión y eléctricos.
Como definición, un coche híbrido es aquel que combina un motor térmico con uno eléctrico. El motor de combustión utiliza gasolina o diésel como combustible, haciéndose cargo del desarrollo de la potencia y la propulsión y recargando la batería, mientras que el motor eléctrico proporciona fuerza para traccionar a través de la energía eléctrica, ocupando el puesto principal cuando la situación así lo requiere, que suele ser en ciudad y a baja velocidad.
Nota: debido a sus características, que ahora veremos, va a ser muy raro que te encuentres con un coche híbrido de transmisión manual.
El desarrollo de la tecnología híbrida para el sector de la automoción tiene su origen en las normas europeas sobre emisiones contaminantes que regulan los límites para las emisiones de gases de combustión interna.
Estas normas también han contribuido al desarrollo del etiquetado medioambiental. Ya se han dictado una gran cantidad de normas para todo tipo de vehículos, pero como los turismos representan la mitad de las emisiones de dióxido de carbono de la UE, nos centraremos en ellos. Estas son las normativas euro aprobadas hasta la actualidad:
Nombre | Fecha | CO | HC+NOx | NOx | PM |
---|---|---|---|---|---|
Euro 1 | 1992 | 2.72 | 0.97 (1.13) | - | 0.14 (0.18) |
Euro 2, IDI | 1996 | 1.0 | 0.7 | - | 0.08 |
Euro 2, DI | 1996 | 1.0 | 0.9 | - | 0.10 |
Euro 3 | 2000 | 0.64 | 0.56 | 0.50 | 0.05 |
Euro 4 | 2005 | 0.50 | 0.30 | 0.25 | 0.025 |
Euro 5 | 2009 | 0.50 | 0.23 | 0.18 | 0.005 |
Euro 6 | 2014 | 0.50 | 0.17 | 0.08 | 0.005 |
Nombre | Fecha | CO | HC | HC+NOx | NOx | PM |
---|---|---|---|---|---|---|
Euro 1 | 1992 | 2.72 (3.16) | - | 0.97 (1.13) | - | - |
Euro 2 | 1996 | 2.2 | - | 0.5 | - | - |
Euro 3 | 2000 | 2.30 | 0.20 | - | 0.15 | - |
Euro 4 | 2005 | 1.0 | 0.10 | - | 0.08 | - |
Euro 5 | 2009 | 1.0 | 0.10 | - | 0.06 | 0.005 |
Euro 6 | 2014 | 1.0 | 0.10 | - | 0.06 | 0.005 |
Estas normativas se han centrado en la reducción de la emisión de gases a la atmósfera, añadiendo nuevos componentes, sobre todo a los motores diésel, haciendo más eficientes las transmisiones manuales y, también, ayudando al desarrollo de los motores híbridos.
El honor de ser el primer coche híbrido producido en serie lo ostenta el Toyota Prius XW10, hoy un clásico de nuestras carreteras pero que salió en 1997 sólo para el mercado japonés, aunque sólo tres años después se internacionalizaría.
El año de su presentación ganó el premio al mejor coche del año en Japón y comenzó a importarse de forma privada por otros países.
Sus características eran (porque esta versión dejó de fabricarse en 2003):
Motor NHW10
Toyota Hybrid System
Gasolina: 1,5 L 1NZ-FXE DOHC I4
13,5:1 compresión
43 kW (58 hp ) a 4000 rpm
102 N·m (75 lb·ft ) a 4000 rpm
Eléctrico: motor288 V
30 kW (40 hp) @ 940 rpm
305 N·m (225 lb·ft) @ 0 rpm
Pero volviendo al tema que nos ocupa, es decir, cómo funciona un coche híbrido, estos cuentan con dos baterías: la batería “clásica” a la que estamos acostumbrados en los coches de combustión, que se encarga de arrancar el motor, y otra batería de tracción, que se encarga de suministrar electricidad a los motores que mueven e impulsan las ruedas.
Esta segunda batería de tracción se recarga gracias a un generador que activa el motor de combustión, además de recargarse también gracias al freno regenerativo, que aprovecha la parte de la energía cinética generada al acelerar y frenar, transformándola en energía eléctrica, que es almacenada para su uso cuando sea necesario.
En cualquier vehículo híbrido, siempre y cuando se haya acumulado o se disponga de suficiente energía, el modo eléctrico ocupará el rol principal en la propulsión. El motor eléctrico o el térmico, de este modo, se irán turnando, o funcionarán de forma conjunta, según decida el sistema del propio vehículo, a pesar de que dependiendo del modelo podremos encontrarnos con modos de conducción en los que el conductor decide qué tipo de motor utiliza, siempre que esté disponible.
Esto quiere decir que, si las condiciones necesarias no se cumplen, el motor eléctrico no se activará. Esto es, si dispone de poca carga o si la velocidad del coche en ese tramo es superior a la que puede desarrollar el motor eléctrico. En ese caso, el motor eléctrico pasará a un segundo plano o será sustituido por el motor de combustión.
Nota: los coches que utilizan gas natural comprimido (GNC) o gas licuado del petróleo (GLP), también son considerados híbridos, a pesar de que en este post nos centremos en los híbridos con motor eléctrico.
La batería de tracción consta, generalmente, de varios módulos de ion litio que almacenan la energía que proporciona el motor de combustión y, de haberlo, el freno regenerativo. Además, dependiendo del tipo de coche híbrido, este puede ser enchufable (o no) y cargar su batería desde una toma de corriente.
La principal diferencia entre la batería convencional y la batería del híbrido es que esta última tiene un voltaje superior a los 12 V habituales en un coche, y su tamaño puede variar según el tipo de híbrido (un híbrido enchufable tiene por lo general una batería más potente y pesada que un híbrido mixto o un híbrido “suave”).
Los módulos de la batería ayudan a distribuir la energía que contribuyen a propulsar el motor, haciendo que el consumo de combustible sea menor, al contribuir al movimiento de las ruedas.