Cuando un neumático está muy desgastado y deteriorado podemos comprobarlo a simple vista. Pero, sin embargo, cuando su estado está empezando a ser perjudicial para la conducción, puede que un vistazo rápido no sea suficiente para determinar su estado. A la hora de conducir, podrás detectar pequeños detalles como puede ser una cierta pérdida de adherencia sobre terrenos mojados, que afecta tanto a la estabilidad como a la distancia de frenado. Piensa, además, que llevar neumáticos en mal estado puede suponer una multa de 200€ por cada neumático, 800€ en total si los cuatro estuvieran deteriorados.
Algunos signos de desgaste y sus causas son los siguientes:
Llantas inadecuadas
No todos los conductores modifican las llantas con las que el coche fue entregado, pero, en caso positivo, conviene que sea de la medida justa, ya queuna llanta que sea demasiado estrecha o demasiado ancha produce un desgaste constante en la banda de rodadura del neumático.
Una mala alineación de los neumáticos
El estado de los neumáticos depende también de la alineación de los ejes, cuyo buen ajuste resulta primordial para equilibrar el desgaste, y también el consumo de combustible. Cuando un eje está mal alineado, encontraremos que sólo uno de los laterales de la banda de rodadura de los neumáticos muestra desgaste. Si nos descuidamos, puede darse la situación de que el neumático afectado se vuelva irrecuperable. Para realizar la alineación de los ejes deberás acudir a un taller especializado.
Presión baja con grandes cargas
Puede resultar evidente, pero la carga que lleve el vehículo influye directamente en el desgaste de los neumáticos. Un coche que lleve mucha más carga de lo normal necesitará también elevar la presión de sus neumáticos para paliar en la medida de lo posible el desgaste en la banda de rodadura. Si la presión se mantiene baja, la presión del peso del vehículo castigará al neumático y provocará desgaste.
Golpes contra los bordillos, trampas mortales
Uno de los factores de riesgo que estropean nuestros neumáticos y aceleran su desgaste (cuando no causan un reventón) son los bordillos de las aceras. Especialmente conocidos por los conductores urbanos, esas pequeñas rozaduras o golpes, que apenas notamos cuando vamos al volante contribuyen a su deformación y desgaste.
Ocurre lo mismo con los golpes al coger un bache, que además dañan la suspensión.
Mucha o poca presión = problemas
Como vimos en este artículo sobre el
qué ocurre cuando un neumático tiene mucho aire, un exceso de presión (o su defecto), influye directamente en la relación del neumático con el pavimento, y genera un tipo concreto de desgaste, además de poner en entredicho nuestra seguridad por riegos de reventones, pinchazos, pérdida de adherencia, etc.
Usa el tipo de neumático adecuado según la carretera
Si, por circunstancias geográficas, eres de esos conductores que necesita cambiar sus neumáticos por unos de estación (verano o invierno), o las carreteras que sueles transitar son muy abruptas, o llevas mucha carga, tendrás que ser muy cuidados@ con los neumáticos que utilices, ya que unos no adecuados podrán desgastarse mucho más rápido de lo que desearías.
Cómo comprobar la edad de los neumáticos y su desgaste
En los neumáticos puedes encontrar su fecha de fabricación, dato que te ayudará a poder estimar, junto al desgaste que muestren, el tiempo de vida útil que le queda a tus neumáticos antes de proceder a su cambio.
La fecha de fabricación viene marcada por un código conocido como “DOT (Department of Transportation)”, compuesto por cuatro dígitos, que indican la semana y el año de fabricación. Por ejemplo, un neumático cuyo DOT fuera 0122 habría sido fabricado en la primera semana del año 2022.
Cómo comprobar el desgaste. 1,6 mm, el canto de una moneda, como referencia
Cuando un neumático sale de fábrica, la profundidad de sus hendiduras (el dibujo que ves en el exterior) está, normalmente, entre los 8-8,5 mm. Lógicamente, con el uso estas hendiduras irán perdiendo profundidad – como la suela de unos zapatos -.
Este es quizás el indicador más habitual. Los fabricantes suelen recomendar cambiar los neumáticos una vez las hendiduras bajan de los 3 mm de profundidad, momento en el cual la adherencia comienza a verse comprometida, sobre todo en situaciones de lluvia y pavimento mojado o húmedo.
El límite impuesto por la ITV es de 1,6 mm de profundidad. Por debajo de este límite, el coche no pasará la inspección técnica y tendrás que cambiar los neumáticos a la mayor brevedad posible.
Para medir esta profundidad, el método casero es introducir una moneda entre las hendiduras. Si no, si acudes a un taller utilizarán herramientas digitales de medición y específicamente creadas para medir con fidelidad la profundidad de la hendidura de tus neumáticos, dato clave para saber cuándo cambiarlos.
Resumen de factores de riesgo para tus neumáticos
Además de estos puntos que acabamos de ver, podemos hacer un pequeño resumen de otras variables que afectan al estado de nuestros neumáticos, como son:
- Mal estado del asfalto o de la vía en general
- Las características de la propia vía
- El estado de la suspensión del vehículo
- La tracción del vehículo y su estado en general
- El tipo de conducción
Cambia los neumáticos inmediatamente si…
- Has sufrido un pinchazo no reparable
- El neumático muestra signos patentes de deformidad o las gomas están despegadas
- El neumático tiene marcas de corrosión o asperezas en la cubierta
Tips para alargar la vida útil de los neumáticos
Si quieres exprimir al máximo la vida útil de tus neumáticos sin poner en peligro tu seguridad, lo más importante es que los cuides siguiendo una serie de recomendaciones, que son las siguientes:
- Uso de una presión adecuada, lo que significa seguir las directrices del fabricante del vehículo y revisar regularmente la presión. Con los cambios de tiempo suele variar, si realizar un viaje largo, etc. En cualquier caso, su revisión constante es una buena práctica
- Hacer un cambio de neumáticos desde los delanteros a los traseros. La razón es la siguiente: la dirección suele estar en la pareja de neumáticos delantera, por lo que su desgaste siempre es mayor. Intercambiarlos por los traseros contribuye a relajar el desgaste de los delanteros y darle ese papel a los traseros, que suelen estar en mejores condiciones
- Compra neumáticos de calidad y huye de los usados o de marcas de poca confianza, que sólo harán aumentar tu frecuencia de visita al taller de neumáticos y, a la larga, aumentar el coste que dedicas a los neumáticos
- Almacenar correctamente los neumáticos significa alejarlos de la luz directa y del frío. Si eres de los conductores que emplea neumáticos de verano e invierno, nunca los dejes expuestos al calor o al frío ni, por supuesto, a la intemperie, ya que su desgaste se verá agravado, aunque no los estés empleando.
Neumáticos en mal estado según tipo de vehículo en España
Agárrate, porque vienen curvas, patinazos y reventones. Según un estudio en el que ha participado el fabricante
Goodyear, en España circulan aproximadamente 1,5 millones de vehículos con los neumáticos en mal estado. Se corresponden con:
- Turismos: 1.272.419
- Furgonetas: 121.585
- Motocicletas: 71.357
- Camiones: 55.625
- Ciclomotores: 55.065
- Autobuses: 2.148